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Recordando a Pablo Braga

Recordando a Pablo Braga

Aún cuando sólo intercambié unas cuantas palabras con él, es uno de los recuerdos más preciados que guardo el haber conocido a Pablo Braga y haber visto a su banda tocar en un escenario en Oruro.

El antecedente se remonta a la amistad que Edwin (Tiburón) había hecho con Pablo y L6b6t6my en 2005, durante los meses que él y su familia habían permanecido en Buenos Aires (Argentina) y en donde ambos habían llegado a un acuerdo para que la banda pudiera visitar Bolivia y muy en particular Oruro.

Domingo 7 de Mayo de 2006: Ya desde la mañana estuvimos en el lugar del evento preparando los tragos para la gran noche. Tenía una gripe endiablada que por un momento me hizo pensar dos veces sobre ir al concierto esa noche. Es más, estaba decidido a no ir pues tenía un dolor de cabeza insoportable y mi naríz parecía ya una cañería rota (…).

Fue como a las 21 horas cuando mi querido amigo Oscar Velásquez (Joya) compañero de banda vino a casa a tratar de convencerme para ir a ver a L6b6t6my pero no le hice caso hasta que alguien llamó a su móvil. Era Pablo, diciendo que él y la banda ya estaban en la Terminal de Oruro con todas sus cosas. Ante tal situación no tuve otra que acompañar a Oscar a la Terminal así que me cambié rápido y tomamos un taxi.

Al bajar los reconocimos, eran cuatro tipos que esperaban frente a la puerta oeste de la Terminal y que tenían un montón de cosas (instrumentos y demás) a sus pies. Oscar y yo fuímos a su encuentro y los saludamos a todos con un abrazo. A duras penas pude decirles: “Muchachos…Bienvenidos a Oruro”.

Tomamos un par de taxis y los llevamos a casa de nuestro entrañable amigo Nelson (Nelo) que gentilmente había aceptado darles cobijo durante su permanencia en la ciudad. En el trayecto conversamos un poco acerca de los detalles de su viaje desde Cochabamba. Recuerdo que había un paro del transporte interdepartamental que hasta ese entonces no facturaba por sus pasajes. Habían llegado desde Cocha muy apretados en un taxi.

Ya en la casa de Nelson todo estaba listo. Luego de preparar los tragos en el local, nos habíamos tomado la tarde entera él, su hijita, sus hermanas, Oscar y yo arreglando y ordenando las camas, mantas, el cuarto donde iban a pasar la noche, etc. Las primeras palabras de Pablo una vez allí fueron “¡Qué recibimiento!”. Una frase que siempre recuerdo de él, la misma que lanzó de manera irónica al ver y señalar un crucifijo en la pared del cuarto pues la mamá de Nelson es muy católica.

Fuímos a comprarles un poco de comida (pollitos broaster) y mientras cenaban hablábamos de todo y de nada. Recuerdo que Sebastián se había puesto un ch’ullo (gorro) que tenía Nelson y trataba de tocar una pequeña zampoña. Algo que me pareció especialmente divertido fue ver la forma en que Pablo le insistía (y hasta le suplicaba) a Nelson que le vendiese una entrada de un concierto de L6b6t6my en Sao Paulo. Como sabemos los amigos de Nelson, él estuvo un buen tiempo trabajando y viviendo en San Pablo (Brasil) y allá de alguna forma consiguió la mencionada entrada que al final Pablo no se la pudo arrebatar, je, je, je… en fin…

Los dejamos con Nelson y su familia y nos fuímos al local. Todo estaba ya listo menos una cosa: faltaba el pedal doble del bombo con el que practicábamos así que tuve que hacer toda una travesía desde el Parque de La Unión hasta la casa del Tiburón para recogerlo. Maldito Tiburón que no tuvo consideración de la gripe que ya me tenía podrido.

Para mi vuelta ya los L6b6t6my estaban alistándose y el local estaba concurrido no de la manera que quería el Tibu (organizador) pues era domingo. Había gente sí, pero se presentaron los mismos problemas con los que atravesamos siempre en un under: gente que pedía rebaja de entradas, ebria, etc.

Con el único miembro de la banda con el que compartía algo de afinidad era con Gastón (Pherguz) pues tanto él como yo simpatizamos con el River Plate argentino y hablamos de eso durante un buen rato. Por desgracia para ambos justo aquel día el archi-rival de River, el Boca Juniors lograba el título del Campeonato Clausura. En fin…

Comenzó la tocada, y con excepción de Agaliarepth y Amduscias todas las bandas convocadas (Crucifexus, Mortualia, Acedia) compartieron el escenario con L6b6t6my. Su presentación fue de lo mejor que presencié en un “under” de Oruro. Ellos mismos hicieron su sonido, guitarras, batería, bajo todo estuvo de lujo. Era tal el grado de profesionalismo y experiencia que tenían que no necesitaron ayuda alguna de parte del sonidista de esa noche, recuerdo incluso a Pablo puteándole acaloradamente a David (Estuco) pidiéndole que no tocara nada y que se alejara de los equipos, je, je, je…

Del concierto solo tengo una palabra para describirlo: Alucinante. No dejo de agradecerle a Oscar por haberme convencido de ir.

 

Éstas tomas algo borrosas de los momentos de L6b6t6my en el escenario de la Federación de Gremiales en la calle La Paz (lugar del concierto) me las hizo llegar el Tiburón pero no me dijo o no recuerda quién las tomó, así que me gustaría que alguien se manifieste para darle los créditos pues aunque borrosas, capturó algo que para nosotros vale mucho y que hasta ahora representa uno de los pocos, sinó el único testimonio de la presencia de L6b6t6my en Oruro.

 

El concierto terminó como a las cuatro de la madrugada, el frío era insoportable y en mayo se podría decir que el invierno hace un “calentamiento” para darnos en la madre en los días de junio y julio donde más se siente. La gripe se me había triplicado pues ahora apenas podía hablar y la nariz la tenía completamente obstruída. Aún así nos quedamos a limpiar y a poner orden en el local. Me fui a casa (no recuerdo cómo) ya a las seis de la mañana cuando el día estaba claro y el sol ya asomaba. Dormí todo el día y recién pude reaccionar cerca de las diez de la noche del día lunes.

Mientras estuve en cama el día entero, Edwin (Tiburón), Mirian, Iron, un cuate y los L6b6t6my fueron a dar una vuelta por la ciudad. Fueron al museo, al zoo y llegaron hasta la vieja careta oxidada allá en la Ciudadela Universitaria.

El paseo continuó el día martes por el tradicional Mercado Kantuta, o el “shopping norte” como le conocemos nosotros, un lugar donde muchos de nosotros vamos a comprar cachibaches, peluches, juguetes y ropa usada je, je, je… Por supuesto que Pablo y los muchachos aparte de saborear unos deliciosos rellenos, también se compraron algo y muy sorprendidos además pues decían que si querían comprar aquello en Buenos Aires, les costaría un ojo de la cara.

 

Y bueno, el día del concierto también había bebido mucho y una vez concluída su presentación y en un momento de locura mezclada con algo de emoción, me acerqué a cada uno de ellos y les pedí un autógrafo ja, ja, ja… las cosas que uno hace de ebrio pues no suelo hacer tales cosas cuando estoy en mis cabales pero en fin, no me arrepiento y resultó un lindo recuerdo.

Estoy seguro de que Edwin, Mirian y Nelson tienen mucho más que contar pues estuvieron con L6b6t6my durante casi toda su permanencia en nuestra ciudad.

Después de eso Pablo, Sebastián, Fernando y Gastón se despidieron y partieron para cumplir con otro compromiso dentro del marco de su gira por Bolivia. Ya nunca más volvimos a ver a Pablo…


1 comentario

Noche -

Carlos, felicidades por recordar a un músico desaparecido, cuando sucedió corrieron un montón de e-mails, tributos, etc. Pero no conozco a nadie que lo haya recordado 1 mes después, medio año después, un año despues...